La mayoría de los saltos de esquí tienen un piso de madera o una base de metal o plástico. Las alfombrillas (22x22cm) se fijan al suelo respectivo con los tornillos adecuados, con los dispositivos de inserción de las alfombrillas deslizantes Watertrax apuntando hacia el frente y hacia la derecha. Las colchonetas se juntan primero en áreas más grandes (aprox. 1m x 2m) y luego se colocan una tras otra comenzando desde la mesa de batida y hasta la salida. Se deben usar aproximadamente 4 tornillos por 1 metro cuadrado (aproximadamente 20 piezas). Cuanto más empinado se vuelve, más tornillos usas para unir las alfombrillas.

Para que los saltadores tengan una mejor orientación al acercarse, se deben colocar alfombras de colores (por ejemplo, rojo) a la derecha e izquierda del carril de aproximación. Las marcas de colores también deben instalarse directamente en el borde del despegue, para que el despegue también se pueda establecer mejor allí.

Es recomendable instalar un sistema de rociadores de agua en el borde del carril de aproximación, especialmente para saltos de esquí tipo 4. Dado que se generan temperaturas muy altas por la fricción de hasta 80 km/h, la fricción entre el esquí y las esteras de plástico se reduce significativamente con agua. El sistema de rociadores contribuye significativamente a la larga vida útil de las alfombrillas y a la protección de la superficie de esquí. Es suficiente si, por ejemplo, se coloca una manguera de agua en el borde derecho de la pared lateral del inrun desde el inicio hasta la mesa de despegue. Se debe enroscar una pequeña boquilla en la manguera cada 3 m aproximadamente. El sistema de rociadores de agua es una instalación fácil con un gran efecto positivo. Todos los saltos de agua más importantes del mundo utilizan el agua disponible de la piscina o del lago para regar la pista de entrada. Un sistema con aproximadamente 7 bar es suficiente como bomba. La capacidad necesaria de la bomba depende de la altura del salto de esquí.